jueves, 8 de diciembre de 2011

¡¡¡HOMBRE AL AGUA!!! (POR LAS PRISAS)

Hace pocos años, época de los Brisas de Valencia.
Lugar : Marina Norte, pantalán Bravo.
Atraque : creo que número cuatro, mirando al este.
Vecinos : a babor un catamarán antiguo, a estribor un oceanis de 30 ó 32 pies.
Barco : Parakoli, Oceanis 397 en gestion.
Más o menos creo haberos situado.
Había salido esa mañana el barco mencionado con un grupo de habituales clientes, ese día al entregarles el barco me dicen que su intención es pescar al curri "tollinetas" ö lo que se presente, que piensan agotar el día, dado que ese barco volvía a zarpar esa noche a Ibiza les ruego regresar sobre las seis ó siete de la tarde para poder solventar algún posible problemilla y dejarlo debidamente repostado.
Me presenté a la hora prevista y el barco no estaba, subí al paseo elevado y no se veía nada cerca, un mástil en la lejanía me hizo suponer que era él, pero no tuve seguridad hasta que tire mano del móvil y hablé con ellos.Efectivamente eran, pero de la hora pactada, ni hablar del peluquín.Pasado un buen rato y a toda máquina hizo su entrada al puerto, dirigiendose a toda máquina hacía su amarre a más velocidad de la correcta. Llegando al sitio inicia la maniobra tal y como otras veces ya habían practicado. Cian correctamente
pero no meten la rueda a babor a tiempo y el barco se les cruza y se atraviesan, uno de los tripulantes al darse cuenta que van atropezar con el oceanis de estribor, intenta parar el golpe con el bichero, pero dada la inercia del barco el bichero no aguanta , se rompe y ¡¡¡HOMBRE AL AGUA!!!
Inaudito, risas a montón del resto de los compañeros.Yo, vociferando para que pongan punto muerto al tiempo que salto al catamaran y de él paso al Parakoli, mientras el buen hombre consigue agarrarse a los cabos del fondeo del barco de estribor y repuesto del susto, soltándo improperios va nadando hasta el pantalán y consigue con ayudas salir del agua.
Mientras sus compañeros, todavia con sus risas, insistían en una maniobra ya imposible, el barco ya acolchado contra el muelle y sín espacio ni parar ir avante ni atrás.
En ese momento apareció la zodiac del puerto, imagino que por la cámara de vigilancia  que hay a la entrada del pantalan habian observado el pequeño desastre y venian a hechar una mano y ayudarnos a salir de aquella situación.
¿Cómo es posible tener ataques de risa, con una persona  a un metro escaso de la hélice?

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