En Palamós por la mañana fueron mis sobrinos a por provisiones en plan serio y bebida en cantidad, pues pensaba en una singladura más larga de lo habitual, como así fué.Salimos a media mañana previo pacto con mi sobrin Maria, a partir de ya dejaria de llamarme tío Martín y ella entonces con sus veinte y pocos años y sobre todo en puerto y con gente cerca me llamaria Mon chère y a su vez ella seria Ma cherie, nos reímos un montón el resto de la travesia , además la bandera francesa del barco se prestaba.Recuerdo 48 horas de calor espantoso y calma total día y noche,ayudados por el YANMAR y sín viento no paramos hasta OROPESA DE MAR en dónde entramos a descansar del calor agotador.A la mañana siguente temprano Miguel nos dejó ,se fúe en tren,el trabajo le reclamaba.El tren pasa junto al puerto y una vez lo vimos pasar nos hicimos a la mar con un noreste suave, izamos en la bocana y con un través abierto bajamos de una bordada hasta SPLAYA en muy pocas horas.Ante la bocana me permití una maniobra de libro,foque a la contra, caña trincada a sotavento y mayor flameando me permitio arriar tranquilamqnte, adujar la cabulleria y poner unos minutos el motor para entrar a puerto.
El YAMAHA aquel fúe un exito, a la semana se habia vendido y unos meses despues me crucé con él,subia hacia Barcelona con otros nuevos dueños que supongo lo habrán disfrutado como yo ó mucho más espero.
FÍN DE ESTA HISTORIETA.
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